martes, 12 de febrero de 2013

¿Para qué las lágrimas, si están las sonrisas? ¿Para qué las discusiones, si están los abrazos? ¿Para qué la calle, si esta tu hogar? ¿Para qué realidades, si están tus sueños? ¿Para qué enemigos, si está tu familia? ¿Para qué un lugar solo, si existe el hombro de alguien? ¿Para qué el rencor, si existe la alegría? ¿Para qué un mundo, si vives en tu mente? ¿Para qué la discriminación, si existe algo que llaman igualdad? ¿Para qué humillar, si puedes halagar? ¿Para qué despreciar, si puedes amar? ¿Para qué caminar, si puedes volar? ¿Para qué lastimarse, si puedes buscar ayuda? ¿Para qué el sol y la luna, si existen las estrellas? ¿Para qué una mansión, si existen detalles pequeños? ¿Para qué el odio, si existe el amor? ¿Para qué recordar, si puedes olvidar? ¿Para qué el pasado, si existe un presente? ¿Para qué sentirse solo, si puedes tener una mascota? ¿Para qué sentarse, si puedes saltar? ¿Para qué el maltrato, si existen las caricias? ¿Para qué los humanos, si puedes soñar? ¿Para qué una bebida o un cigarro, si existen los libros y la música? ¿Para qué la rutina, si se puede romper? ¿Para qué encerrarte, si puedes ser libre? ¿Para qué los malos amores, si puedes reír? ¿Para qué ropa a la altura, si puedes ser tu misma? ¿Para qué dormir, si tu sueño es lanzarte en paracaídas o escalar? ¿Para qué callar, si puedes gritar? ¿Para qué esperar, si en este instante puedes comenzar?

martes, 5 de febrero de 2013


" y esta bueno que se complique
es ahi cuando ves de que estas hecho "